Con un trabajo casa por casa estamos logrando convencerlos, dijo el gobernador

Emilio: cada vez son más las personas que se entusiasman con la presa El Zapotillo

Habitantes de Temacapulín, dispuestos a firmar cuando vean las casas donde serán reubicados, estimó

JUAN CARLOS G. PARTIDA

“Es creciente el número de personas que se interesan y se entusiasman con la posibilidad de la presa”, dijo el gobernador Emilio González Márquez respecto a los habitantes de Temacapulín con quienes dice se ha dialogado en directo, ya no en actos públicos, para convencerlos de ser reubicados por la construcción de la presa El Zapotillo, que inundará ese poblado además de las comunidades de Palmarejo y Acasico.

El director de la Comisión Nacional del Agua, José Luis Luege Tamargo, agregó que la colaboración del gobierno federal está lista para apoyar en la reubicación de los desplazados por la presa, que traerá “grandes beneficios” a los mismos habitantes reubicados; mientras que el gobernador de Guanajuato, Juan Manuel Oliva, recordó que el acuerdo interestatal que permitiría que aguas de El Zapotillo fueran enviadas a la ciudad de León, ya fue cumplido “en tiempo y forma” por su gobierno con la presa El Realito, construida en tierras guanajuatenses pero que también sirve para dotar de agua a la ciudad de San Luis Potosí.

“Para este año hay una cantidad que no se va a ejercer toda, una parte importante va a pasar para el próximo año porque estamos terminando los procesos para iniciar la construcción de vivienda para poder ofrecerla a la gente de Temacapulín y de las otras dos comunidades también. Eso le corresponde al estado (de Jalisco). Tanto la indemnización como la generación de alternativas va muy bien, es creciente el número de personas que se interesan y se entusiasman con la posibilidad de la presa”, dijo González Márquez, en una rueda de prensa común con Luege y Oliva, en el marco de la sesión del Consejo de Cuenca Lerma Chapala, realizada este martes en un hotel de Ajijic.

El gobernador jalisciense dijo que la oferta consiste en una “casa digna” a cada familia, agroparques de invernaderos en la región, negociar con la Conagua para que tengan los derechos turísticos sobre la zona una vez construida la presa, lo que volverá a repoblar la región.

“Cada día son más los habitantes de Temacapulín que se acercan con nosotros y desde que dejamos de hacer eventos públicos va muy bien, porque los eventos públicos se llenan de gente de Guadalajara que se opone a todo y que se opone también a esta presa, y que ahora con un trabajo casa a casa, persona a persona, estamos logrando el convencimiento. Ellos quieren ver las casas, cuando estén las casas dignas en propiedad, ellos están dispuestos a firmar”, agregó.

Recordó que el proyecto, a pesar de que la licitación será publicada este jueves, va todavía para largo y que la cortina está a 30 kilómetros del pueblo más cercano, por lo que no se trata de una reubicación inminente. “Son tres años para construir la cortina”, afirmó, pero el proceso para llenar la presa y que el agua llegue hasta Temacapulín podría tardar de cinco a seis años aún.

El gobernador también dijo que el agua que se vaya de El Zapotillo a León, esa ciudad guanajuatense tendrá que pagarla y que la cantidad que utilice será regresada ya tratada al río Lerma, para que llegue al lago de Chapala. “Jalisco no tiene ninguna afectación en cuanto al potencial del agua que se pueda utilizar”.

Luege Tamargo, de su lado, dijo que los proyectos que “aprovechan los escurrimientos” de agua, como es el caso de las presas de Arcediano y El Zapotillo, son benéficos y de gran visión, porque uno de los problemas más serios en el país es la sobreexplotación de acuíferos.

“Debe haber la labor de convencimiento de parte nuestra y de los gobiernos estatales, debe hacerse conciencia en la población que puede ser afectada o en desacuerdo con los proyectos, del enorme beneficio de estos proyectos”, dijo el titular de la Conagua.

Por su parte, el gobernador de Guanajuato, Juan Manuel Oliva, recordó que su entidad ya cumplió con su parte en el acuerdo interestatal que obliga a Jalisco a enviarle agua desde El Zapotillo, pues en su territorio erigió una presa, El Realito, que también dota de agua a San Luis Potosí, un acuerdo promovido por la propia Conagua y los gobiernos de los tres estados en una visión regionalista más allá de la territorialidad, pero que pese a ello también está dispuesto a colaborar en lo que se necesite en Jalisco para que la presa de El Zapotillo se construya lo más pronto posible.

“Nosotros accedimos a la petición del Presidente de la República, del director general de Conagua, de mostrar una solidaridad en el tema hídrico de la región, pero nosotros sabemos también que habrá que colaborar. Yo he platicado con el gobernador (González) y con el señor Luege y estamos dispuestos a colaborar en las tareas que nos correspondan. Las tareas que nos asignó el gobierno federal aquí en Jalisco las cumplimos respecto al tema de El Realito y en su oportunidad las tareas que nos pongan en el caso en mención las trabajaremos también con precisión, oportunidad y puntualidad”, asentó Oliva.