Picachos tiene amparo para no ser clausurado

El lunes inician obras en el tiradero de basura de Zapopan.

• Vie, 19/02/2010 - 20:32

Guadalajara.-El tiradero de basura de Picachos no puede ser clausurado, debido a que tiene un amparo otorgado por el Tribunal Administrativo del Estado (TAE), así lo reveló el director de Ecología del Ayuntamiento de Zapopan, Miguel Prado Aguilar.

La suspensión fue solicitada y otorgada durante la primera semana de enero, por las autoridades entrantes, para evitar que el tiradero pudiera volver a ser clausurado como ocurrió el año pasado, porque no existía control de lixiviados, lo que contaminó el arroyo Grande Milpillas.

“Este amparo buscaba que nos dejaran trabajar, porque nosotros no ocasionamos ninguno de los problemas ahí existentes. Segundo, aparte de los problemas que ya tenemos de cero presupuesto y cero maquinaria, celdas desbordándose, lixiviados por todos lados, pues que nos dieran oportunidad de trabajar para demostrar que sí teníamos el ánimo de hacerlo y en base a eso se nos concedió”, explicó.

El funcionario informó que el próximo lunes iniciarán los trabajos para la construcción de la celda emergente, la cual se ubicará en el lado sur poniente de la celda tres, y en el futuro formará parte de lo que será la celda cuatro.

Agregó que en quince días más arrancará la edificación de una pequeña laguna para contener los lixiviados, la cual se situará en la herradura que forman las celdas uno, dos y tres.

“La vamos a construir para empezar a bombear todo, canalizar ahí, empezar a regar por aspersión, empezar a reciclar lixiviados para irlos disminuyendo. Para empezar, captar los que tenemos por ahí regados y empezar a poner orden”, indicó.

En estas dos obras se invertirán diez millones de pesos. La celda para el confinamiento de la basura se terminará en 45 días y la laguna para lixiviados llevará 30 días luego que se inicien los trabajos.

Además se destinarán dos y medio millones de pesos en la reparación de seis máquinas, entre las que están un Buldozer, camiones de volteo, otras conocidas como patas de cabra, las cuales compactan la basura, otra conocida como mano de chango, que son las que escarban para sacar tierra para impermeabilizar las celdas. Las máquinas estarán listas en 30 días como máximo, algunas ya entraron a los talleres y otras, por su volumen, van a ser reparadas en el lugar.

Prado Aguilar anunció que además se destinarán 250 mil pesos en la compra de siete motobombas: dos eléctricas de 27 caballos de fuerza y cinco que operan con gasolina de 30 caballos de fuerza, las cuales se usarán para reciclar y reinyectar los lixiviados a las celdas. “Ya se empieza a mejorar tantito el panorama en Picachos”, concluyó el funcionario.

Elizabeth Rivera Avelar