Esfuerzo tirado a la basura

Jorge Valdivia

• 2010-02-14•Acentos

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Junto con la batalla contra el mosquito causante del dengue, el hoy tristemente célebre Aedes aegypti, el otro gran fracaso de los gobiernos estatal y municipales en 2009 fue el programa de separación, recolección y procesamiento de desechos.

La propia meta que en la materia se puso el gobierno estatal es quizá uno de los mejores indicadores del tamaño del fracaso. Según consta en el III Informe de Gobierno de la actual Administración, el objetivo era depositar 2.8 millones de toneladas de basura en cumplimiento a la NOM-083-SEMARNAT-2003, pero apenas se llegó a 792,902, la misma cantidad que en 2008, pese a que el año pasado ya fue obligatorio separar y procesar adecuadamente los desechos, según se estipulaba en la norma ambiental estatal NAE-SEMADES-007/2008.

Como ya lo reconoció la nueva directora de Ecología del Ayuntamiento de Guadalajara, Magdalena Ruiz Mejía, gran parte del fracaso estuvo ligado a la falta de sociabilización del programa (Público, 7 de febrero de 2010), indispensable para propiciar el cambio cultural para que la gente reconociera la importancia de separar la basura e hiciera suya la iniciativa. A lo que se sumó la falta de compromiso de las empresas encargadas de recoger y procesar los desechos.

Ahí está el ejemplo de Caabsa Eagle, que distribuyó una miseria de folletos informativos sobre cómo y cuándo separar la basura y cuyos trabajadores siguen llevándose los desechos y revolviéndolos sin importar si lo que sacó la gente no corresponde con lo que debía recogerse en la jornada.

La directora de Ecología de Guadalajara anunció que para finales de marzo pondrán en marcha una nueva estrategia para relanzar el programa de separación de residuos, que contempla crear un nuevo reglamento (con mayor rigidez en las multas), obligar a la Caabsa a cumplir y mejorar la difusión e información.

Lo de las multas ya demostró que no funciona, por lo que creo los esfuerzos se deben concentrar en el segundo y tercer punto, en especial en este último, pues me consta que muchos tapatíos estuvieron y están a favor de la separación de la basura, pero nunca se les informó adecuadamente de cómo sumar su empeño a la iniciativa. Además de que poco podrá funcionar la cadena si el primer eslabón no cumple su parte. Lo que espero es que el gobierno estatal se sume a la tarea, para que no sea otro año echado a la basura en la materia.