Los ciclistas “dejamos de ser un fantasma”

Este jueves, poco más de cuatro mil participantes demostraron el éxito de la convocatoria surgida en abril. Hoy, el grupo Gdl en Bici es consultado para elaborar el Plan Maestro de Movilidad no Motorizada.

Abril de 2008, hace un año, cuando los paisajes de bicicletas y edificios tapatíos empezaban a hacerse normales. Foto: Público

Guadalajara.- El Paseo de Todos cumplió un año y los ciclistas lo festejaron anoche como niños, literalmente, ya que el tema en esta ocasión fueron los niños: chupones, gorritos, mamelucos, biberones y hasta una pareja con pañales.

No fue un festejo cualquiera. Los integrantes de Gdl en Bici, agrupación que convoca a los paseos nocturnos desde hace un año, creen que uno de los principales logros de su actividad en las calles es que “dejamos de ser un fantasma para la sociedad y para las autoridades”, definió Yeriel Salcedo, integrante del organismo.

De ser unos cientos en el comienzo, ahora los paseos nocturnos se cuentan por miles de ciclistas. La Unidad Estatal de Protección Civil del Estado, que acompaña los recorridos de la caravana en dos ruedas, calcula que el primer jueves de cada mes se reúnen entre tres mil y cinco mil personas.

Con un mensaje lúdico —pues cada paseo es temático, en el que algunos se suben a la bici con un disfraz—, los activistas lo que quieren es que los automovilistas los vean y los respeten, como cualquier medio de transporte en la ciudad.

“La finalidad del recorrido es tomar las calles y por medios lúdicos exigir el respeto hacia el ciclista y exigir espacio para el ciclista. Queremos también animar a la gente que vea que éste es un medio alternativo para transportarse en la ciudad y que trae beneficios a la salud”, expuso Yeriel Salcedo.

Superhéroes en bici, La ley de la selva, Circo, maroma y teatro o Que viva México son algunos de los temas de los paseos ciclistas para todos, en los que se festeja una efeméride, como la Independencia, o de plano plantean críticas a las políticas de movilidad en la ciudad, donde el auto sigue siendo el rey de las calles.

Como cada primer jueves de mes, anoche los ciclistas tomaron las calles y avenidas de Guadalajara para exigir el derecho de transitarlas: “Mismas personas, mismos derechos”, se leía en una camiseta alusiva a las bicicletas. Y lo demostraron. Según Protección Civil, anoche hubo unos 1,500; pero, al final del recorrido, el grupo Gdl en Bici afirmó que, según lo que contó la misma dependencia estatal, en realidad fueron más de cuatro mil, lo que lo convertiría en uno de los más nutridos. Aunque ya va un año de escenas de este tipo, a algunos no les dejó de sorprender: “Son como un millón de gentes”, dijo un niño que esperaba cruzar la calle en cuanto pasaran los de dos ruedas.

A un año de distancia, Yeriel Salcedo, Juan García o Patricia Martínez, integrantes de Gdl en Bici, no usan la bici sólo como medio de transporte diario. Ahora son invitados por el gobierno estatal para dar opiniones en la elaboración del Plan Maestro de Movilidad no Motorizada, que busca trazar una red de ciclovías y calles tranquilizadas, con lo que se promoverá en mayor medida el uso de la bici.

Además, la actividad de otros grupos organizados, junto con Gdl en Bici, ha impulsado que los ayuntamientos metropolitanos construyan ciclovías, como en el caso de Guadalajara, que instala un carril exclusivo en Federalismo y elabora los proyectos respectivos para la calle 8 de Julio, o para que se deje un carril compartido en la avenida Chapultepec, para el transporte y las bicis.

Tras realizar trece paseos nocturnos, Yeriel Salcedo expresó que ha habido un avance en la aceptación de los automovilistas. “Cuando comenzó el paseo, más de la mitad de los automovilistas se enojaban, nos empezaban a pitar y nos decían que nos quitáramos. Ahorita hacemos una campaña en los cruceros y les decimos por qué estamos pedaleando y ya un 20 por ciento son los que nos pitan o se ponen molestos por lo que hacemos”, apuntó.

Las anécdotas son la norma de cada paseo, como el caso de don Mike, un mecánico (de autos) que no falla y que ha bajado diez kilogramos, o las parejas que se conocieron en el paseo y ahora son novios. Anoche no fue la excepción. Gritos de “beso, beso” a las parejas, mentadas de madre a los automovilistas que se querían pasar, gritos de “desertores” acompañados de otra mentada a aquellos que decidían abandonar la caravana y hasta un huevazo que salió de un edificio de departamentos sobre avenida Revolución y la calle 40, que alcanzó la espalda de un entusiasta de las bicis.

En esta ocasión el paseo, de alrededor de catorce kilómetros, inició donde de costumbre: en el Parque Revolución. De allí circularon por Hidalgo, donde las bicicletas se adueñaron del túnel vehicular, situación que asombró a propios y extraños. Después tomaron Calzada del Ejército y bulevar Tlaquepaque hasta dar vuelta a la izquierda en Olímpica. Otra vuelta a la izquierda en Revolución hasta la 40, donde se dirigieron a Javier Mina y de allí enfilaron al Centro. En 16 de Septiembre tomaron a la derecha para después tomar avenida La Paz para terminar en el Expiatorio.

“Lo que es digno de celebrarse es que más gente se suba a la bicicleta, no de que el Paseo de Todos cumpla un año”, explicó, como niño, Cuco Ruiz, de Gdl en Bici.