PRESA EL ZAPOTILLO

l llamarnos violentos tratan de justificar una posible represión, indicaron

Declaraciones de Coll, una estrategia de hostigamiento: habitantes de Temacapulín
Sólo dos personas han aceptado desalojar el pueblo para construir la presa, precisaron

RAUL TORRES

Los habitantes de Temacapulín, Acasico y Palmarejo se dijeron indignados por las declaraciones del titular de la Comisión Estatal del Agua, César Coll Carabias, quien los acusó de violentos; además, denunciaron que detrás de las palabras del funcionario hay una estrategia bien definida de hostigamiento y un intento por justificar una posible represión contra quienes habitan los poblados que los gobiernos federal y estatal pretenden inundar con la construcción de la presa El Zapotillo.

Ayer una comisión de Temacapulín visitó la ciudad para manifestar su postura ante las recientes declaraciones de Coll Carabias y José Luis Luege Tamrgo, director de la Comisión Nacional del Agua: aseguraron que se viola su derecho a la información cuando se les niega ésta con el pretexto de evitar brotes de violencia contra quienes ya vendieron, y refutaron el argumento de Coll Carabias explicando que nunca se solicitaron los nombres de quienes ya llegaron a un arreglo con el gobierno del estado (eso de cualquier manera se sabe en un pueblo chico como Temacapulín), sino que la información que requieren es la que respecta al proyecto del nuevo centro de población y la forma en que se reubicará la iglesia.

Las señoras María de Jesús García Guzmán, Mónica Jáuregui Becerra, Consuelo Carvajal y Ana García Guzmán, coincidieron en que Coll Carabias y el gobernador, Emilio González, mienten al decir que la mayoría está de acuerdo con el proyecto y que ya muchos vendieron; ellas sostienen que sólo dos personas han aceptado el ofrecimiento del gobierno estatal y sospechan que la negativa a entregar información se debe precisamente a que se haría público el fracaso de las negociaciones que a finales de diciembre inició la CEA.

Las mujeres también dejaron en claro que el sacerdote Gabriel Espinosa no es el líder de la resistencia de Temacapulín: “aquí no hay líderes, todo el pueblo está siendo afectado”.

Refirieron que si en esta situación alguien ha evitado el diálogo es el gobierno del estado, y como muestras recordaron la negativa del gobernador de visitar Temacapulín para hacer la consulta a la que se comprometió el 23 de mayo de 2008, la reserva de información sobre el proyecto del nuevo centro de población y el hecho de que la oficina de negociación se haya colocado en Yahualica y no en Temacapulín o en la cabecera municipal que le corresponde: Cañadas de Obregón.

Además de las declaraciones públicas de Luege Tamargo y Coll Carabias, los rumores que corren por Temacapulín a falta de información certera tensan más el estado de ánimo de sus habitantes; según las mujeres, ya se habla de que personal de la CEA está haciendo nuevas mediciones porque la cortina de la presa podría elevarse hasta 125 metros, lo que también inundaría el poblado de San Gaspar de los Reyes.

“Ya hasta andan diciendo que el Ejército nos va a venir a desalojar”, comentó Consuelo Carvajal.

Por su parte, Evangelina Robles, abogada del Colectivo COA y una de las personas que asesoran legalmente a la comunidad de Temacapulín, recordó que en México todos tenemos derecho a una defensa jurídica, por lo que desestimó las declaraciones de Coll Carabias en torno a que los principales opositores a la presa son “activistas de fuera”.

Indicó que esta asesoría legal comenzó a partir de una petición de la gente de Temacapulín y recordó que este caso ya lo analizan tambien desde la oficina del alto comisionado de las Naciones Unidas en la red nacional de defensa de los derechos humanos Todos los Derechos para Todos.

Por su parte, Gustavo Castro, miembro de la Red Latinoamericana de Afectados por Presas, expresó la solidaridad de este organismo con los pobladores de Temacapulín y anunció que se eligió este pueblo para ser sede del tercer encuentro mundial de afectados por las presas. Los encuentros anteriores tuvieron sede en Brasil y Talilandia.