ONG llevarán el caso mexicano a tribunales internacionales
La siembra de transgénicos condenará a la miseria a miles de campesinos
La Asamblea Nacional de Afectados Ambientales (ANAAM) se pronunció en contra de la siembra, importación y comercio de maíz transgénico en México, en la tercera y definitiva jornada del foro “Los transgénicos nos roban el futuro”, organizada por Vía Campesina, la Red en Defensa del Maíz y la propia ANAAM como conferencia alterna a la que realiza la FAO. Y en ese sentido dijo que el foro será integrado en un expediente para presentarlo ante tribunales internacionales e impedir la introducción de la semilla genéticamente modificada al país.
Durante el día otras organizaciones realizaron mítines relámpagos en distintos cruceros de la ciudad mediante pancartas y repartiendo folletos, se proyectaron documentales y hasta se organizó una elotiza gratis en la calle frente al hotel Hilton, donde están los delegados de al menos 190 países que asisten a la conferencia oficial de la FAO.
“Cada uno de nosotros posee información, tiene testimonios de agravios, de lucha, en contra de la introducción que pretende hacer federalizadamente el gobierno mexicano de los maíces transgénicos al territorio nacional. Haciendo gala de su acostumbrada sordera no ha querido escuchar lo que el pueblo dice”, afirmó Octavio Rosas Landa, miembro de la ANAAM.
La jornada del foro alterno al de la FAO incluyó una reseña de los argumentos presentados el primer día de la audiencia, una exposición de Andrés Barreda sobre los transgénicos en el contexto económico, político y ambiental en México; testimonios de científicos para conocer los impactos en el ambiente, la biodiversidad y la salud y un intercambio de preguntas y respuestas entre las personas asistentes al Museo de la Ciudad, donde se realizaron las dos jornadas.
Hoy fue uno de los días más activos en cuanto a eventos alternativos a la reunión oficial de la FAO, pues además del foro en el Museo de la Ciudad, por la tarde otras organizaciones continuaron también con la realización de mesas redondas con especialistas internacionales invitados, con sede en Casa Loyola.
También en diferentes cruceros de la ciudad, ambientalistas repartieron folletos, mostraron pancartas y buscaron crear conciencia entre los automovilistas acerca de los graves riesgos que implica la introducción de semilla transgénica al país.
Frente al Hilton, hotel sede de la reunión de la FAO, al menos 30 activistas se manifestaron de una forma muy particular, al preparar una elotiza gratuita para quienes por ahí pasaban.
“No hace falta producir más alimento, el hambre es un problema de distribución de la comida”, “Aquí nació el maíz, sin él México no existiría como lo conocemos” y “La vida no se patenta, las semillas transgénicas son propiedad intelectual”, decían algunos de los letreros que mostraban a los delegados llegados para la reunión oficial del organismo de las Naciones Unidas para la agricultura y la alimentación. Aunque intentaron ingresar al hotel, los guardias de seguridad impidieron el acceso a los manifestantes, quienes señalaban que querían entregar directamente una carta al director adjunto de la FAO para que conociera su posicionamiento.
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