Ágora
Presas y plantas = a fracasos
El sexenio de Emilio González Márquez ha ido de un fracaso a otro en materia de abastecimiento y saneamiento de agua en la entidad. Por más que se encomie la puesta en marcha de plantas tratadoras en diferentes municipios, el verdadero monstruo devorador de agua potable y expulsor de aguas residuales, la zona metropolitana de Guadalajara, sigue sin resolver un problema que ha alcanzado proporciones gigantescas y tiene la peor de sus manifestaciones en la gravísima contaminación del río Santiago y sus efectos en la salud contra habitantes –sobre todo- de los municipios de El Salto y Juanacatlán, con el ejemplo tan cruel de la muerte del niño Miguel Ángel López Rocha hace dos años, a cuya familia Emilio El Piadoso se ha negado a indemnizar pese a que, por fin, la CNDH concluyó que existió responsabilidad de las omisas autoridades
La terquedad absurda por construir una desde siempre inviable presa de Arcediano, aderezada con billetes de a millones de pesos echados al literal caño en que se tiene convertido el Santiago, fue el primer gran error de Emilio El Hídrico en el tema. Claro que a los diputados actuales, más apurados por irse de vacaciones a pesar de que acaban de llegar al cargo, les importa un bledo las carretadas de billetes públicos mal gastados en algo que se sabía que no tenía futuro y no fincarán alguna responsabilidad por el mal uso del erario. Y que no salgan que la inviabilidad vino a partir de esos estudios, porque era evidente desde siempre que bombear agua desde cientos de metros de profundidad de una presa alimentada además con agua residual “tratada”, era una sinrazón que expertos de todo el mundo y por varios años habían señalado.
Las “mega” plantas tratadoras anunciadas desde que llegó al cargo de gobernador, siguen en mero papel y atascadas en la burocracia y los intereses económicos de los particulares a quienes se les quiere concesionar el negocito, muy a la usanza panista. En la zona de El Ahogado, donde hace un año se anunció comenzaría la construcción de la primera de esas dos plantas, los trabajos simplemente no han iniciado en primer lugar porque para no variar el gobierno panista crea proyectos antes de tener el consenso de los que se verán afectados. Así, en particular debido a que no se negoció con los ejidatarios de El Zapote para comprarles las tierras necesarias para la planta, el proyecto sigue siendo eso mientras cada segundo, imparable, el flujo de aguas contaminadas sigue haciendo su labor de erosión a la salud pública y ambiental.
Ni qué decir de la planta tratadora en Agua Prieta. Mucho más grande –en proyecto, ojo- que la del Ahogado, esta planta también luce el abandono de los hechos pese a los oropelescos discursos. Ahí se “sanearían” las aguas de desecho del norte de la metrópoli, aguas abajo de donde se construiría la presa de Arcediano. Ahora, ya con la muerte del proyecto de Arcediano, hacer la planta hasta Agua Prieta no tiene razón alguna de ser construida hasta allá, por todo lo que implicaría entubar el enorme flujo de aguas residuales. Claro que ni siquiera es necesario señalar lo anterior, porque si la planta del Ahogado quien sabe para cuándo iniciará, la de Agua Prieta seguro se irá –si se construye- como otra más de las herencias inconclusas de esta administración.
Los ejemplos sobran y en estos momentos el que está más en vitrina es el de la presa en El Zapotillo. Allá también fueron los panistas con su soberbia de que sólo aquí mis chicharrones se venden aunque no truenen, y sin consultar a los pobladores de las tres comunidades condenadas a la desaparición bajo las aguas del monstruo de 105 metros de altura, hicieron todo su tinglado de concesiones e inicio de obras, motivando una resistencia que va mucho más allá de los habitantes afectados y que ha unido a muchas voces para condenar otro proyecto que, ahora es obvio vaticinarlo, fracasará ante el repudio generalizado de un modelo que pretende ayudar a unos (sobre todo en Guanajuato) perjudicando a otros (estos sí todos en Jalisco). Eso de los ramales del acueducto que iría a León con beneficio para municipios alteños, está por verse, porque requeriría una descomunal inversión que incluiría un bombeo costosísimo que parece poco probable que lo vayan a pagar los ayuntamientos, que prefieren buscar la opción más viable y mucho más económica de pozos profundos o presas locales que no son utilizadas.
Tal vez lo único que se pueda lograr en materia hídrica para el abastecimiento en la capital estatal sea la presita esa que bautizaron como El Purgatorio. Y digo tal vez porque aunque el proyecto está para iniciar este año, también ya terminando el tercer mes del 2010 es hora que no comienzan los trabajos. Lo más inexplicable de esta cadena de fracasos es que continúe en el cargo de director CEAsar Coll Carabias, quien todos los días sin faltar uno demuestra que el paquete le ha quedado grande y carece de alternativas que permitan con mucha menor inversión resolver el problema.
Partidiario
Despojo. A pesar que los fuertes intereses económicos en torno a los desarrollos turísticos en la costa jalisciense buscan prevalecer sobre la justicia social, las formas absurdas de despojo se suceden una tras otra con, al menos, la aceptación del gobierno estatal que nada hace –al contrario, usa su fuerza pública en apoyo- para evitar que las fauces del capitalismo ramplón devoren la sustentabilidad que podría darse con alternativas viables a quienes por décadas y hasta siglos han estado asentados en esa zona. Lo que ocurre en Chamela es el caso más reciente de esta depredación imparable, porque no puede contarse con el apoyo de las autoridades cuando estas mismas deciden que es un gran negocio hacerse socio de empresarios extranjeros para crear un nuevo Cancún, o se alían con otros para encarcelar ejidatarios en Campo Acosta. El actual gobierno estatal ahora sí no tiene el menor pudor en demostrar de qué lado está. Ya se sabía, pero nunca como ahora es tan evidente…
Y ya con ésta. Mañana por cierto en el CUCBA de raUldeG habrá un análisis de expertos sobre el tema nuevo Cancún. Es de anticipar que el resultado será una condena a las maneras en que se plantea el “desarrollo” para los lugareños, depredando el ambiente, comprando sus tierras a precios de remate y ofertando un esplendoroso futuro como mucamas, bell boys y jardineros a los que ahí habitan. Anticipamos aquí que uno de los primeros grandes obstáculos para iniciar las obras será –además de la oposición de los pobladores- el recorte de kilometraje de playas protegidas por el decreto de santuario tortuguero que se hizo a partir del plan de ordenamiento ecológico local de Tomatlán en diciembre pasado y que la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) ya tiene impugnado a través de su área jurídica. Hoy, en el Congreso, estará el super socio de Rasaland, Oscar García (100)Manzano(as), sensei financiero de Emilio El Contador, quien será sometido a rudo escrutinio al menos por la bancada del PRD. Ya vimos que el millonario no quiere decir los términos del contrato firmado entre Pensiones y Rasaland bajo el absurdo ¿argumento? que se trata de un negocio, como si 89 millones de dólares del fondo de retiro de 115 mil burócratas fueran de su propiedad. Por cierto si usted quiere conocer cómo los desarrolladores turísticos millonarios y sus socios se molestan por las denuncias, visite mi blog y lea los comentarios en los que se me acusa de ser un opositor al desarrollo bajo argumentos decimonónicos que ven en el capital privado al diablo. Son una joya…
garciapartida@yahoo.com.mx, www.jcgpartida.wordpress.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario