Silencio de la SSJ sobre pérdida de muestra de orina de Miguel Ángel

El secretario había admitido el arsénico en el cuerpo del niño


La Secretaría de Salud Jalisco evitó hacer declaraciones ayer sobre la muestra de orina que se tomó al niño Miguel Ángel López Rocha antes de morir.
1-Marzo-08


La Secretaría de Salud Jalisco (SSJ) evitó hacer declaraciones ayer sobre la muestra de orina que se tomó al niño Miguel Ángel López Rocha antes de morir, y que es la única prueba de que el niño tenía niveles de arsénico en su organismo por encima de lo normal. Dicha muestra, según el Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses, fue solicitada al laboratorio a cargo de su análisis para ratificar el resultado y la presunta respuesta que se les dio es que “se perdió” (Público, 28 de febrero de 2008).

El análisis fue realizado por el Laboratorio de Microanálisis, a cargo de la toxicóloga Luz María Cueto, por encargo —y pago— de la SSJ. Al requerir en tres ocasiones una entrevista con algún funcionario de esta dependencia para hablar del tema, ésta fue negada. La explicación de la Dirección de Comunicación Social es que, al notificarle de la solicitud, “el secretario” pidió que remitieran a la reportera con la doctora Cueto, pues no era competencia de la SSJ. La muestra no está en poder de la dependencia, sólo el resultado del análisis.

Al principio de la semana, el secretario de Salud, Alfonso Gutiérrez Carranza, dijo que el resultado del análisis de la doctora Cueto fue el que la dependencia tomó como válido. Ahora, según entrevista que el funcionario sí concedió ayer a otro medio de comunicación, la versión válida es la del Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses, que no encontró arsénico fuera de norma. A su juicio, no se contrapone, puesto que el medicamento otorgado al pequeño pudo diluir el arsénico.

Público habló previamente con la reconocida toxicóloga, quien negó errores en la muestra pero no quiso abundar más, puesto que prepara una declaración al respecto para la próxima semana.

El próximo lunes arrancará la toma de 414 muestras a habitantes de La Azucena, El Salto y Juanacatlán, en busca de niveles de arsénico y otros 21 metales pesados.

Guadalajara/Maricarmen Rello