"PRESIONA" PROEPA POR PLANTAS DE TRATAMIENTO

Para abatir las descargas contaminantes al Río Santiago, la Procuraduría Estatal de Protección Ambiente realiza gestiones ante los industriales
Buscan medidas prácticas para disminuir índices de contaminación
GUADALAJARA.- El procurador ambiental, Fernando Montes de Oca y Domínguez, aseguró que las empresas son responsables del 15% de las aguas negras que se vierten al contaminado río, mientras los drenajes de la Zona Metropolitana (ZMG) desechan el 80%, siendo las granjas porcícolas y avícolas, culpables del resto (cinco por ciento).“Cada empresa tiene la obligación de hacer sus análisis (de calidad del agua) y presentarlos ante la autoridad. A la vez, hemos acudido al Consejo de Cámaras Industriales y a la Asociación de Industriales de El Salto, para que en conjunto podamos establecer medidas prácticas que puedan ayudar a que quienes no tienen los recursos necesarios para instalar plantas de tratamiento, puedan adquirir apoyos a nivel estatal o federal.
¿Está Proepa presionando para que cuenten con plantas de tratamiento?
Sí, indudablemente. Pero más que presionar, estamos en una primera etapa invitando. Hay que recordar que la conciencia ciudadana en este momento es mayor y también tienen que colaborar.Montes de Oca y Domínguez sostuvo que los ciudadanos deben tratar de evitar echar en las descargas domiciliarias productos químicos, “porque no son los drenajes aptos para estas sustancias, sino que los puedan concentrar en sus propios municipios para que tengan el manejo adecuado”.Indicó que la contaminación de metales pesados en el Río Santiago, no sólo es causa de las industrias, sino también de lo que los pobladores vierten a la tubería por el tipo de productos que consumen.“La contaminación del Río Santiago es la suma de las pequeñas contaminaciones que se hacen, no es que podamos decir que aquí viene una descarga de arsénico concentrado. Los niveles en las muestras tomadas, están dentro de los parámetros de las normas mexicanas establecidas, de tal forma que esa suma de descargas dentro de norma, pues es lo que aumenta la propia contaminación, pero de momento no hemos recibido reportes de que se hayan encontrado altas concentraciones de ningún tipo de metal pesado, ni de arsénico”, subrayó el procurador.El pasado mes de febrero, un niño de apenas ocho años de edad, Miguel Ángel López Rocha, murió presuntamente intoxicado por arsénico al caer al Santiago, lo que de nueva cuenta puso a la luz pública, el grave problema de contaminación que viven los pobladores de Juanacatlán y El Salto, donde se acumula la mayor parte de la polución.En lo que va del año, la Proepa ha realizado 60 inspecciones en el Río Santiago, de las cuales nueve han sido canalizadas a la Comisión Nacional del Agua (Conagua).Sostuvo que parte fundamental para limpiar el río, será la construcción de las dos mega plantas de tratamiento El Ahogado y Agua Prieta, que aún no han sido licitadas, pero para las que ya hay disponibles más de mil millones de pesos de parte del Gobierno federal.

EL INFORMADOR