9.11.11

Pide revisión constante de las plantas

El Copag pudo haber frenado la descarga de aguas negras: CMIC

ANÍBAL VIVAR GALVÁN

Aun y cuando el hecho de arrojar las aguas negras resultantes de la estancia de los atletas en la Villa Panamericana fue “algo involuntario”, el Comité Organizador de los Juegos Panamericanos Guadalajara 2011 (Copag) pudo haber frenado la salida de los líquidos, aseguró el presidente del Consejo Mexicano de la Industria de la Construcción (CMIC), Miguel Zárate, quien mencionó que las plantas potabilizadoras del complejo que hospedó a los atletas se vieron superadas por la cantidad de agua producto de la lluvia que cayó un par de días antes de que iniciara la justa deportiva.

“La Villa Panamericana no estaba ya a cargo del constructor (cuando se liberaron las aguas negras), fueron entregadas las instalaciones para que fueran atendidas por parte del Copag y corresponde a ellos la supervisión de todas las áreas de la Villa Panamericana”, dijo y enfatizó que se debe realizar una investigación para saber si existe algún culpable de ésta, además consideró que, al hacer caso de las quejas de algunos vecinos y de los atletas que se encontraban hospedados ahí que manifestaron la presencia de malos olores, se pudieron haber evitado las afectaciones que actualmente se están viviendo.

Agregó que para que la situación anterior no se vuelva a repetir durante la estancia de los deportistas parapanamericanos se tendrá que realizar un monitoreo constante de los niveles de las dos plantas de tratamiento que se instalaron, tanto la que se acondicionó para que funcionara solamente durante los Juegos como la que se construyó para que quedara al servicio permanente para el complejo.

El líder de los constructores afirmó que, en las condiciones y con la cantidad de gente que se espera que habiten en la Villa una vez que sean comercializados los departamentos, la planta de tratamiento con la que se cuenta será funcional siempre y cuando tenga la supervisión y el mantenimiento constante que evite que ocurra de nueva cuenta el derrame.

“Para poder haber hecho el proyecto y realizar la construcción de las villas panamericanas es una serie de estudios hidráulicos y de distintas ingenierías para poder estar calculando qué tipo de planta se necesita y qué capacidad (requiere). La planta de tratamiento que se construyó para la operación normal de la villa, que va a ser de tres mil personas en su capacidad máxima, es suficiente para una operación constante a través del tiempo”, dijo Zárate quien enfatizó que la inspección tendrá que reforzarse durante la época de lluvias debido al modo en el que funciona el sistema de tanques que permite el tratamiento de las aguas.

“A lo que me refiero es que la cantidad de agua depositada en los tanques se rebasa durante las lluvias, y al no tener el cuidado y el mantenimiento ni la revisión adecuada para pode

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