¿Cuál es la especie más peligrosa del mundo?
Detente un momento antes de continuar leyendo y reflexiona. ¿Qué especie puede considerarse la más peligrosa y amenazante del mundo?
Hace unos días, leyendo sobre noticias de ecología y medio ambiente, era fácil ver cómo el mundo está cambiando
tan poco a poco pero de una forma tan drástica. Así, me planteé a mí
misma la pregunta y, la verdad, es que la respuesta no se hizo
esperar. ¿Qué especie podría ser más peligrosa para el mundo mismo, tal
como lo conocemos, que el propio ser humano?
La omnipotencia está
tan presente en el ser humano que se ha creído con derechos de hacer y
deshacer a su antojo sin plantearse cuáles son las consecuencias de cada
acto, como si tuviera el poder suficiente de enmendar cualquier acción
por muy desastrosa que sea. Pero ésta realidad no es nuestra, eso sólo
es una quimera que unos desean mantener en su mente.
Nosotros somos la especie más peligrosa
del mundo por creer semejante absurdez, por creer que el poder nos da
derechos para crear cuando lo único que conseguimos es destruir y la
ambición va creciendo a pasos agigantados. Sólo tenemos que ver cuáles
son los efectos del cambio climático, el deshielo del
Ártico y como muchas especies continúan desapareciendo, cómo se mantiene
la caza sin que haya un control (en muchas ocasiones), o lo difícil que
es acceder a las energías renovables para apostar por un mundo
diferente.
No sé qué opinán ustedes
respecto a todas estas afirmaciones, no me considero una persona trágica
aunque tampoco puedo decir que sea objetiva cuando la sangre me hierve
ante semejantes actitudes. Considero que ahora mismo somos la especie
más peligrosa del mundo, peligrosa para nosotros mismos en tantos y
tantos sentidos, pero sé que también podemos cambiar las cosas cuando cada uno pone un poco de sí y se une.
Sólo hay que ver cómo los 30 del Ártico
han vuelto a casa después de haber estado en la cárcel por defender el
Ártico. El mundo se volcó para pedir su liberación y aunque ha costado,
se ha conseguido. Éste es sólo un ejemplo de lo que se puede lograr si
todo el mundo pone un poco de su tiempo, de su pasión, de su vida, para
comenzar a mostrarle al resto del mundo que a pesar de que podemos
destruir también podemos crear algo único y maravilloso. Podemos cuidar la naturaleza, respetarla, estar en armonía con el mundo sin resultar ser una amenaza constante.
Tal vez, dejar atrás el 2013 y verme
ante todas las posibilidades que ofrece un nuevo año me ha hecho soñar
despierta, pero creo que si nos proponemos retos, podemos
alcanzarlos. Todo se reduce a: “Piensa globalmente, actúa localmente”
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