Actualizarán red de monitoreo del aire
La
capa gris, ese desafío. La Semadet actualizará la tecnología existente
para lograr un mejor análisis de los contaminantes. - La Semadet planea evaluar la calidad del aire en más ciudades del Estado y mejorar la de Guadalajara
La
administración estatal prevé una serie de acciones para medir el
impacto en las personas de las malas condiciones ambientales
GUADALAJARA, JALISCO (16/MAR/2013).- La
estrategia para renovar e incrementar la red de monitoreo en la Zona
Metropolitana de Guadalajara no será letra muerta ante el cambio de
administración. De hecho, la recién creada Secretaría de Medio Ambiente y
Desarrollo Territorial (Semadet) buscará innovar, y además de
actualizar la tecnología con que se cuenta, sumará herramientas que
permitan detectar más contaminantes.
Actualmente, los equipos únicamente miden las cantidades de ozono, bióxido de nitrógeno, monóxido de carbono, bióxido de azufre y partículas menores a 10 y a 2.5 micras.
La intención de las autoridades que recién asumieron en la dependencia medioambiental es, para cuando el periodo 2013-2019 se cumpla, no sólo Guadalajara, sino las ciudades medias de Jalisco (que ya empiezan a mostrar deficiencias en su calidad de aire), tengan plena conciencia de qué contaminantes llevan sus habitantes al organismo.
A este punto, cada ciudadano de esta metrópoli lleva en promedio 300 gramos de agentes contaminantes a sus pulmones en un día. Y para que la comunidad sepa las secuelas que trae a su salud un aire en condiciones deficientes, la Semadet sumará esfuerzos con Secretaría de Salud Jalisco (SSJ).
En un hecho inédito, ambas instancias implementarán un programa homologado para acercar la información a la mayor cantidad de gente posible. Esto porque, aunque sí se percibe la polución en el aire, una gran parte de la comunidad tapatía no considera como trascendentales los índices de contaminación, que en zonas como Las Pintas se mantienen prácticamente de forma estacional.
La titular de la dependencia naciente, Magdalena Ruiz Mejía, dejó en claro que la proyección de incrementar la cifra de estaciones de monitoreo (impulsada por la Semades en el sexenio anterior) no se descontinúa; así sucederá con todos los proyectos pendientes de la administración que recién concluyó. De esta manera, el punto de revisión fijo que pensaba instalarse en la Zona Valles de Tlajomulco de Zúñiga sigue en pie.
Empero, la funcionaria dijo que habrá incluso un análisis detallado de los puntos en que se encuentran el resto de las estaciones, para modificar su instalación en caso de que sea necesario. Ruiz Mejía detalló que la estrategia de preservación de la calidad del aire en la Ciudad de México es uno de sus modelos a seguir, pues la capital del país “nos lleva 20 años de distancia” en este tenor.
La meta se ha trazado: implementar acciones en el corto, mediano y largo plazo, de tal forma que al cierre de la administración (inicios de 2019), el aire de Guadalajara tenga una mejor calidad.
Actualmente, los equipos únicamente miden las cantidades de ozono, bióxido de nitrógeno, monóxido de carbono, bióxido de azufre y partículas menores a 10 y a 2.5 micras.
La intención de las autoridades que recién asumieron en la dependencia medioambiental es, para cuando el periodo 2013-2019 se cumpla, no sólo Guadalajara, sino las ciudades medias de Jalisco (que ya empiezan a mostrar deficiencias en su calidad de aire), tengan plena conciencia de qué contaminantes llevan sus habitantes al organismo.
A este punto, cada ciudadano de esta metrópoli lleva en promedio 300 gramos de agentes contaminantes a sus pulmones en un día. Y para que la comunidad sepa las secuelas que trae a su salud un aire en condiciones deficientes, la Semadet sumará esfuerzos con Secretaría de Salud Jalisco (SSJ).
En un hecho inédito, ambas instancias implementarán un programa homologado para acercar la información a la mayor cantidad de gente posible. Esto porque, aunque sí se percibe la polución en el aire, una gran parte de la comunidad tapatía no considera como trascendentales los índices de contaminación, que en zonas como Las Pintas se mantienen prácticamente de forma estacional.
La titular de la dependencia naciente, Magdalena Ruiz Mejía, dejó en claro que la proyección de incrementar la cifra de estaciones de monitoreo (impulsada por la Semades en el sexenio anterior) no se descontinúa; así sucederá con todos los proyectos pendientes de la administración que recién concluyó. De esta manera, el punto de revisión fijo que pensaba instalarse en la Zona Valles de Tlajomulco de Zúñiga sigue en pie.
Empero, la funcionaria dijo que habrá incluso un análisis detallado de los puntos en que se encuentran el resto de las estaciones, para modificar su instalación en caso de que sea necesario. Ruiz Mejía detalló que la estrategia de preservación de la calidad del aire en la Ciudad de México es uno de sus modelos a seguir, pues la capital del país “nos lleva 20 años de distancia” en este tenor.
La meta se ha trazado: implementar acciones en el corto, mediano y largo plazo, de tal forma que al cierre de la administración (inicios de 2019), el aire de Guadalajara tenga una mejor calidad.
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