Consideran ineficiente el servicio de pipas

En San Isidro llevan cuatro años con escasez de agua

JORGE COVARRUBIAS

Los habitantes de San Isidro, poblado de Zapopan, llevan cuatro años abasteciéndose de agua con pipas, pero en los últimos meses el servicio ha sido ineficiente, incluso hay semanas en las que no reciben el vital líquido, asegura Beatriz Lizama Puga, presidenta saliente de esa comunidad.

“Nunca ha habido agua que nosotros digamos, abramos la llave y hay agua”, comenta.

Alrededor de un año se surtieron de agua en forma intermitente mediante un pozo, y pasado ese periodo las autoridades les informaron que se abatió. Se construyó otro pozo, sin embargo no se ha utilizado porque le falta equipamiento y electrificación. Lizama menciona que la Comisión Federal de Electricidad tiene uno con el que se abastecen cada semana, pero sólo pueden hacerlo durante media hora.

El ayuntamiento de Zapopan, explica, envía agua a través de pipas, sin embargo consideran que el servicio es deficiente y en últimas fechas los choferes han condicionado el servicio a cambio de un pago.

“Las quejas que llegaron hacia mí era de que si no le daban buena propina pues no dejaba agua y ya se han cambiado los piperos y de todas maneras sigue igual, no nos solucionan el problema”, señala.

Lizama menciona que aunque equiparan el pozo, éste se encuentra retirado de la población y para hacerlo funcionar es necesario un tanque de almacenamiento y la introducción de tubería.

Cerca del poblado corren las aguas del río Blanco, las que sólo usan para el riego porque ya están contaminadas.

“Hay un venero de aguas limpias en Cañadas, pero esa agua limpia se cae al río Blanco. Agua limpia se desperdicia en agua sucia. Yo hice la petición de que nos ayudaran a que se hiciera un tanque para que se almacenara y se bombeara esa agua porque no se aprovecha”, añade.

La ropa, el aseo diario y la limpieza de los trastos se tienen que hacer en casa de parientes o en comunidades alejadas que sí tienen agua.

Lizama indica que la escasez de agua ha provocado también un incremento en enfermedades de la piel y gastrointestinales.