Convenios sobre predios de Temacapulín van a 64 por ciento
Talicoyunque. Las inversiones para seguir con la construcción permanecen detenidas. Informador Redacción
- Por primera vez se ventila la cifra de terrenos cedidos al Estado: 183 de 283
El director de la Comisión Estatal del Agua (CEA), José Luis Hernández Anaya, dice que sólo faltan 100 convenios más para tener posesión total de los terrenos de Temacapulin
GUADALAJARA, JALISCO (04/ABR/2013).- Por vez primera, la Comisión Estatal del Agua (CEA) retira el candado que tenía la cifra de acuerdos alcanzados entre el Gobierno de Jalisco y los habitantes de Temacapulín, el poblado alteño que se pretende inundar para dar paso a la Presa El Zapotillo.
Información concedida por el nuevo director del organismo, José Luis Hernández Amaya, deja en claro que la autoridad estatal requiere concretar sólo 100 convenios más para tener total posesión de los terrenos que hay en ese poblado.
Esto es, que 64% de la comunidad que habita en Temacapulín ha convenido vender o intercambiar sus terrenos: al retirar la clasificación “reservada” a la información sobre la cifra de acuerdos alcanzados entre ambas partes, se confirma que 183 de los 283 terrenos en “Temaca” ya son propiedad de la autoridad estatal.
Pero la cantidad de acuerdos que se busca concretar es aún mayor; el problema que impide que esta cifra crezca radica en que varios de los pobladores que desean lograr acuerdos no tienen sus papeles en regla, es decir, carecen de sus escrituras o las han perdido.
Las autoridades que previamente estuvieron a cargo de esa dependencia anunciaron en 2009 que los acuerdos suscritos entre autoridad y ciudadanía tendrían un “blindaje” que impedía ventilarlos a la luz pública, aun bajo solicitudes de transparencia, pues varios de los habitantes que consintieron vender su propiedad, dijeron entonces, fueron “agredidos” por los grupos de oposición.
Inversiones en pausa
El complejo habitacional de Talicoyunque, que ya cuenta con 32 viviendas completamente terminadas y que fue reconocido en su momento como el “Nuevo Temaca” porque ahí se reubicaría a los afectados por la Presa El Zapotillo, permanecerá sin inversión alguna en tanto no se verifiquen las condiciones en que se tramitaron las indemnizaciones durante el sexenio pasado, en el que la CEA estaba encabezada por César Coll Carabias.
“Se tiene que ver todo en conjunto: una radiografía de cómo están las indemnizaciones para continuar con la estrategia jurídica y que se vea el tema legal. Hay gente que quiere convenir pero no tiene escrituras y documentos, y hay que ver cómo se solventa esta falta de documentos”.
De acuerdo con Hernández Amaya, los resultados de este análisis serán ventilados en fechas próximas tanto por la CEA como por la Secretaría General de Gobierno y la Conagua.
ESPERAN A ARISTÓTELES SANDOVAL, A MÁS TARDAR, EL 19 DE ABRIL
El pueblo no descarta “radicalizar” las protestas
Si el gobernador de Jalisco, Aristóteles Sandoval Díaz, no cumple su promesa de salvar de la inundación a las poblaciones afectadas por la construcción de la Presa El Zapotillo, “radicalizaríamos la postura”, advierte el abogado del Comité Salvemos a Temacapulín, Guadalupe Espinoza Sauceda.
Habría marchas, protestas e incluso toma de carreteras; las acciones serán definidas por la población y los activistas; por el momento, esperan que el priista cumpla con su promesa de campaña y con el anuncio, que realizó el 29 de enero pasado en su cuenta de Twitter, de no inundar Temacapulín.
Espinoza Sauceda comenta que dentro de la comunidad se habló de darle 50 días al mandatario estatal para que defina la altura que tendrá finalmente la cortina de la Presa El Zapotillo; el plazo vence este 19 de abril.
“Hasta el momento hemos mantenido una postura sensata, ecuánime, para no parecer intransigentes y que no le tomamos la palabra al gobernador; por eso esperamos que él cumpla”, dijo, al recordar la promesa de que el pueblo sería salvado. Esto, técnicamente, supone que la Presa El Zapotillo tenga una cortina de sólo 80 metros de altura, lo cual equivale a una capacidad de almacenamiento menor.
El abogado del Comité Salvemos a Temacapulín dice que, si el gobernador Sandoval Díaz ignora su palabra, “se van a enojar las comunidades y van a pasar otras cosas”.
De que la Comisión Estatal del Agua (CEA) defienda el proyecto con una cortina de 105 metros, el representante de la comunidad comenta que la dependencia debe acatar las decisiones del Ejecutivo y mantenerse al margen.
ALISTAN ALTERNATIVAS A EL ZAPOTILLO
Ordenar uso del agua es más urgente: ITESO
Antes que construir más presas, para surtir de agua a la Zona Metropolitana de Guadalajara (ZMG) es necesario ponerle orden al uso del líquido; es la lógica con la que un grupo de investigadores del ITESO (Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente) estudia tres estrategias vertebrales para el abastecimiento, con lo que se abren alternativas a la Presa El Zapotillo.
Las estrategias son en tono de políticas públicas, de las cuales se derivan 26 proyectos que buscan presentar al Gobierno estatal. Aunque todavía no hay una fecha para ello, en el periodo de transición se dio a conocer este modelo de gestión a Aristóteles Sandoval, quien mostró interés y pidió que se crearan los proyectos; ahora se espera que el mandatario retome el diálogo, explica Rodrigo Flores, investigador del ITESO e integrante del cuerpo académico que desarrolla los estudios y que prevé, si el gobernador no los recibe, publicar los estudios en diferentes foros.
Las políticas públicas propuestas son necesarias incluso si El Zapotillo es edificada con una cortina a 105 metros y se inundan los poblados de Temacapulín, Acasico y Palmarejo, afirma el experto en economía del medio ambiente.
La primera estrategia eje que ha desarrollado el grupo de expertos es atender el agua no contabilizada, puesto que por diversas causas se fuga entre 32% y 40% de líquido que podría llegar a los hogares metropolitanos. Es decir que sí hay agua, pero no está contabilizada.
Otra idea es el manejo del acuífero, pues según estudios de la Conagua (Comisión Nacional del Agua) se está sobreexplotando, pero se desconoce cómo es el uso que se le da. Para ello, hay que impulsar el proyecto de pozos con función de sonda, porque no hay registro de la calidad y disponibilidad del agua. Además, es necesario atender la recarga del acuífero y así se podrá contar con una fuente de abastecimiento en buenas condiciones.
La tercera estrategia que proponen los especialistas es la captación de agua pluvial. Sobre esta alternativa, comenta Flores, hay estimaciones de que se recuperaría un metro cúbico por segundo de líquido, según datos de Carlos Hernández, del SIAPA (Sistema Intermunicipal de Agua Potable y Alcantarillado).
OBSERVACIONES
A vigilar impacto ambiental y social
Según las acciones que ha mostrado para la realización de sus proyectos, a la Conagua le falta cuidar aspectos ambientales y sociales, califica el académico del ITESO Rodrigo Flores. Ahora toca observar y vigilar estos temas en cuanto a El Zapotillo, proyecto que, dice, debió ponerse a discusión al inicio y no con 60% de avance.
El académico opina que Guadalajara no merece la pérdida de las tres comunidades que inundará El Zapotillo si no ha cuidado el agua, como una postura ética, no importa si la cantidad de habitantes afectados es grande o pequeña, pues los conflictos del uso del líquido son de la metrópoli, no de los poblados.
Información concedida por el nuevo director del organismo, José Luis Hernández Amaya, deja en claro que la autoridad estatal requiere concretar sólo 100 convenios más para tener total posesión de los terrenos que hay en ese poblado.
Esto es, que 64% de la comunidad que habita en Temacapulín ha convenido vender o intercambiar sus terrenos: al retirar la clasificación “reservada” a la información sobre la cifra de acuerdos alcanzados entre ambas partes, se confirma que 183 de los 283 terrenos en “Temaca” ya son propiedad de la autoridad estatal.
Pero la cantidad de acuerdos que se busca concretar es aún mayor; el problema que impide que esta cifra crezca radica en que varios de los pobladores que desean lograr acuerdos no tienen sus papeles en regla, es decir, carecen de sus escrituras o las han perdido.
Las autoridades que previamente estuvieron a cargo de esa dependencia anunciaron en 2009 que los acuerdos suscritos entre autoridad y ciudadanía tendrían un “blindaje” que impedía ventilarlos a la luz pública, aun bajo solicitudes de transparencia, pues varios de los habitantes que consintieron vender su propiedad, dijeron entonces, fueron “agredidos” por los grupos de oposición.
Inversiones en pausa
El complejo habitacional de Talicoyunque, que ya cuenta con 32 viviendas completamente terminadas y que fue reconocido en su momento como el “Nuevo Temaca” porque ahí se reubicaría a los afectados por la Presa El Zapotillo, permanecerá sin inversión alguna en tanto no se verifiquen las condiciones en que se tramitaron las indemnizaciones durante el sexenio pasado, en el que la CEA estaba encabezada por César Coll Carabias.
“Se tiene que ver todo en conjunto: una radiografía de cómo están las indemnizaciones para continuar con la estrategia jurídica y que se vea el tema legal. Hay gente que quiere convenir pero no tiene escrituras y documentos, y hay que ver cómo se solventa esta falta de documentos”.
De acuerdo con Hernández Amaya, los resultados de este análisis serán ventilados en fechas próximas tanto por la CEA como por la Secretaría General de Gobierno y la Conagua.
ESPERAN A ARISTÓTELES SANDOVAL, A MÁS TARDAR, EL 19 DE ABRIL
El pueblo no descarta “radicalizar” las protestas
Si el gobernador de Jalisco, Aristóteles Sandoval Díaz, no cumple su promesa de salvar de la inundación a las poblaciones afectadas por la construcción de la Presa El Zapotillo, “radicalizaríamos la postura”, advierte el abogado del Comité Salvemos a Temacapulín, Guadalupe Espinoza Sauceda.
Habría marchas, protestas e incluso toma de carreteras; las acciones serán definidas por la población y los activistas; por el momento, esperan que el priista cumpla con su promesa de campaña y con el anuncio, que realizó el 29 de enero pasado en su cuenta de Twitter, de no inundar Temacapulín.
Espinoza Sauceda comenta que dentro de la comunidad se habló de darle 50 días al mandatario estatal para que defina la altura que tendrá finalmente la cortina de la Presa El Zapotillo; el plazo vence este 19 de abril.
“Hasta el momento hemos mantenido una postura sensata, ecuánime, para no parecer intransigentes y que no le tomamos la palabra al gobernador; por eso esperamos que él cumpla”, dijo, al recordar la promesa de que el pueblo sería salvado. Esto, técnicamente, supone que la Presa El Zapotillo tenga una cortina de sólo 80 metros de altura, lo cual equivale a una capacidad de almacenamiento menor.
El abogado del Comité Salvemos a Temacapulín dice que, si el gobernador Sandoval Díaz ignora su palabra, “se van a enojar las comunidades y van a pasar otras cosas”.
De que la Comisión Estatal del Agua (CEA) defienda el proyecto con una cortina de 105 metros, el representante de la comunidad comenta que la dependencia debe acatar las decisiones del Ejecutivo y mantenerse al margen.
ALISTAN ALTERNATIVAS A EL ZAPOTILLO
Ordenar uso del agua es más urgente: ITESO
Antes que construir más presas, para surtir de agua a la Zona Metropolitana de Guadalajara (ZMG) es necesario ponerle orden al uso del líquido; es la lógica con la que un grupo de investigadores del ITESO (Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente) estudia tres estrategias vertebrales para el abastecimiento, con lo que se abren alternativas a la Presa El Zapotillo.
Las estrategias son en tono de políticas públicas, de las cuales se derivan 26 proyectos que buscan presentar al Gobierno estatal. Aunque todavía no hay una fecha para ello, en el periodo de transición se dio a conocer este modelo de gestión a Aristóteles Sandoval, quien mostró interés y pidió que se crearan los proyectos; ahora se espera que el mandatario retome el diálogo, explica Rodrigo Flores, investigador del ITESO e integrante del cuerpo académico que desarrolla los estudios y que prevé, si el gobernador no los recibe, publicar los estudios en diferentes foros.
Las políticas públicas propuestas son necesarias incluso si El Zapotillo es edificada con una cortina a 105 metros y se inundan los poblados de Temacapulín, Acasico y Palmarejo, afirma el experto en economía del medio ambiente.
La primera estrategia eje que ha desarrollado el grupo de expertos es atender el agua no contabilizada, puesto que por diversas causas se fuga entre 32% y 40% de líquido que podría llegar a los hogares metropolitanos. Es decir que sí hay agua, pero no está contabilizada.
Otra idea es el manejo del acuífero, pues según estudios de la Conagua (Comisión Nacional del Agua) se está sobreexplotando, pero se desconoce cómo es el uso que se le da. Para ello, hay que impulsar el proyecto de pozos con función de sonda, porque no hay registro de la calidad y disponibilidad del agua. Además, es necesario atender la recarga del acuífero y así se podrá contar con una fuente de abastecimiento en buenas condiciones.
La tercera estrategia que proponen los especialistas es la captación de agua pluvial. Sobre esta alternativa, comenta Flores, hay estimaciones de que se recuperaría un metro cúbico por segundo de líquido, según datos de Carlos Hernández, del SIAPA (Sistema Intermunicipal de Agua Potable y Alcantarillado).
OBSERVACIONES
A vigilar impacto ambiental y social
Según las acciones que ha mostrado para la realización de sus proyectos, a la Conagua le falta cuidar aspectos ambientales y sociales, califica el académico del ITESO Rodrigo Flores. Ahora toca observar y vigilar estos temas en cuanto a El Zapotillo, proyecto que, dice, debió ponerse a discusión al inicio y no con 60% de avance.
El académico opina que Guadalajara no merece la pérdida de las tres comunidades que inundará El Zapotillo si no ha cuidado el agua, como una postura ética, no importa si la cantidad de habitantes afectados es grande o pequeña, pues los conflictos del uso del líquido son de la metrópoli, no de los poblados.
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