CONAGUA...

Conagua o sin ética

Raúl Antonio Iglesias (destruidas) Benítez, a quien muchos situaban –hasta antes de la salida del Fofis Ocampo del (ex)SIAPA(N)- como sucesor de CEAsar Coll Carabias al frente de la dependencia estatal del agua, siempre ha tenido esa tecnocrática forma de imponer los supuestos criterios técnicos de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) por encima de cualquier objeción social. La técnica como lobo del hombre, pues.

Ya dijo el ilustre director regional de la Conagua que por más mítines del Peje en Temacapulín, la presa El Zapotillo se construirá e inundará ese poblado, porque es más importante privilegiar el abastecimiento de León, digo de Guadalajara, que el de un par de cientos de habitantes que ni se meten a bañar en sus propias aguas termales que tanto presumen, ni le prenden veladoras todas las noches al Cristo del Cerro que ha sido símbolo del pueblo destinado a convertirse según sus intenciones en arqueología subacuática. ¿Hay una recomendación de la Comisión Estatal de Derechos Humanos para que se respete el derecho de los pobladores a una vida tranquila? Ja, je, ji, jo, ju.

Ahora Iglesias (destruidas), quien este año se quiere despachar como el emperador del agua en Jalisco, también se rió con todas las vocales de la recomendación que emitió la Comisión Nacional de Derechos Humanos para que la Conagua ponga remedio a la contaminación e indemnice a la familia del niño Miguel Ángel López Rocha, quien murió para convertirse en símbolo de la impunidad que hay en Jalisco, luego de caer al río Santiago, esa cloaca que continúa abierta para perjuicio de cientos de miles de personas sin que alguien ponga remedio más allá de la verborrea política, demagogia que se estrella contra la realidad de los hechos, como la de Emilio El Hídrico.

No acepta la Conagua la recomendación porque, como es común entre tecnócratas, los culpables de los más graves problemas somos todos y ellos, como representantes de la sociedad, poco pueden hacer. El mismo ¿argumento? del gobernador de Jalisco cuando la terrible muerte de Miguel Ángel: “¿qué vas a hacer tú para evitar la contaminación del río?”, me preguntó entonces, cuando le manifesté mi enojo por tan injusta y cruel muerte. Supongo que quería que incinerara mis heces fecales para evitar mezclarlas con el arsénico que causó la muerte del menor.

Así las cosas, está visto que la falta de penalidad para pasarse por el arco de las piernas las recomendaciones de los organismos defensores de derechos humanos, sean locales, nacionales o internacionales, sigue siendo una impostura del sistema político mexicano en todos sus niveles. Era de esperarse, pues por ejemplo las resoluciones del ITEI, que si tienen resultado penal si son desobedecidas, son también destinadas al mismo arco de las extremidades inferiores, porque recordemos que el aparato de justicia es controlado por los mismos que eluden su responsabilidad con todo el cinismo que da la impunidad.

Partidiario

Y ya con esta. En Arcediano, donde se gastaron cientos de millones de pesos del erario jalisciense en un proyecto inviable desde que se planteó como la solución de abastecimiento de agua para la metrópoli, todavía existen visos de interés económico de parte de nuestras pulcras, obedientes, leales y honorables autoridades estatales. Al parecer muerto el proyecto de la presa, ahora el objetivo siempre oculto pero siempre principal de construir un desarrollo inmobiliario, sigue su marcha, pues tras el proceso expropiatorio ahora es tiempo de hacer negocio con los terrenitos. Hay que estar atento con lo que pasa al fondo de la barranca de Huentitán, porque por ahí aún van a surgir muchas sorpresas…

garciapartida@yahoo.com.mx, www.jcgpartida.wordpress.com