México lucha contra la peor sequía en 70 años

Los efectos de la sequía en México agravan la situación alimentaria de millones de habitantes. El gobierno aseguró que la situación es la más grave vivida en décadas y anunció un plan para agilizar la entrega de recursos a los más damnificados.

AFP

Los mexicanos están sufriendo la peor sequía en décadas, lo que podría dejar sin alimentos y ganado a la totalidad de los pobladores de la región del norte del país.

El gobierno anunció un plan para agilizar la entrega de recursos que permitan enfrentar los efectos de la peor sequía registrada en siete décadas y que afecta en distintos grados a 19 de los 32 estados del país.

El presidente Felipe Calderón firmó un acuerdo para movilizar lo antes posible cerca 2.580 millones de dólares en recursos previstos en el presupuesto gubernamental del 2012 para enfrentar la sequía.

"Lo que buscamos es que ninguna familia mexicana se quede sin agua o sin alimento a causa de esta sequía", dijo el mandatario en rueda de prensa y agregó que se estimaron afectaciones en distintas etapas en 1.200 municipios de 19 estados, aunque el mayor impacto se registra en Chihuahua, Coahuila, Durango, San Luis Potosí y Zacatecas.

El investigador Emilio Romero Polanco advirtió que de no aplicarse medidas para contrarrestar la pérdida de productos agrícolas y ganadería, esta población corre el riesgo de padecer hambruna. Además, aseguró que "en este momento el cambio climático es el factor decisivo en el déficit de la producción nacional de granos básicos".

México, un país con más de 112 millones de habitantes, tiene poco más de 2.500 municipios, lo que representa que casi la mitad ha padecido en alguna medida los estragos de la sequía.

"En nuestros estados ya tenemos 17 meses que no nos llueve", dijo el gobernador del estado norteño de Durango, presente en el acto de firma del acuerdo contra la sequía.

Señaló que en los estados más afectados, un 80% de la superficie cultivable se ha dañado. "Prácticamente no hay absolutamente nada de cosecha", agregó.

Con el acuerdo presidencial, el gobierno busca entre otras cosas que haya los recursos suficientes para acelerar la distribución de agua a las comunidades que lo necesitan, incluso a través de carros cisterna, además poner en marcha un plan de rehabilitación y construcción de pozos.