Deficiencias en calidad del agua ''no son novedad''
La contaminación del Río Santiago es el ejemplo más claro de los problemas en calidad y saneamiento del agua en la ciudad. S. NÚÑEZ
- La deuda del SIAPA crece ''como bola de nieve''
Ni siquiera se sabe la cantidad exacta del líquido que llega a la metrópoli, revela César Coll
GUADALAJARA, JALISCO (25/NOV/2010).- Las graves deficiencias en infraestructura y políticas en materia de agua que padece la metrópoli, y su exposición internacional mediante el estudio del Índice de Ciudades Verdes, elaborado por The Economist Intelligence Unit y la empresa Siemens, “no son novedad”, pues resulta evidente que el organismo operador de agua en la ciudad, el Sistema Intermunicipal de Agua Potable y Alcantarillado (SIAPA), tiene serios problemas que se han ido agudizando con el paso de los años.
César Coll Carabias, director de la Comisión Estatal del Agua (CEA), respondió así a la pregunta de qué opinión le merece el resultado de dicho estudio, elaborado en 17 ciudades latinoamericanas, y en el cual Guadalajara comparte el último lugar con la ciudad de Lima, capital de Perú.
“No es novedad, quienes hemos estado en este tema años atrás hemos visto la problemática que cada vez se ha ido agudizando. Desgraciadamente el organismo operador (el SIAPA) no dispone de los recursos o apoyos para lograr que (su déficit hídrico) no se incremente, que ya sería un éxito; y que se revierta, lo cual ya sería el objetivo”.
Para Coll, las deficiencias son tan claras desde el hecho de que no se sabe a ciencia cierta la cantidad exacta del vital líquido que se distribuye en la Zona Metropolitana de Guadalajara (ZMG).
“No toda el agua que se mete al sistema de distribución de los cuatro municipios (metropolitanos) sabemos con precisión cuánto es, porque no hay macromedición, o hay en 30% (…) No hay recursos, y (además) está muy comprometido financieramente el organismo; entonces todo esto hace que se limite su actuación en cuanto a reemplazos de infraestructura”.
Dijo que el problema inició cuando se realizaron obras de gran magnitud para la dotación de agua a la ciudad, que generaron fuertes deudas al organismo metropolitano, mismas que a la fecha no ha logrado cubrir.
“Cuando se hicieron las obras de la Presa Elías González, el Acueducto (Chapala-Guadalajara), la Presa San Gaspar y El Salto en Valle de Guadalupe, se originó una gran deuda y se transfirió al organismo (…) entonces, si el organismo se volvió un gran deudor y no tuvo la capacidad de pago, pues esa deuda ha sido como una bola de nieve que cada año va aumentando”.
En adición a ello, subrayó, la falta de una cultura de pago por los servicios de agua potable y la indisposición del Poder Legislativo para resolver el problema, han sido las causas que generaron esta mala percepción internacional de Guadalajara.
“He visto que llegan peticiones para mejorar e ir cortando la brecha entre el costo real y la tarifa (de agua), y son justamente los diputados los que no las aprueban. Se van por el índice del precio al consumidor cuando se requiere más.
“Luego vienen las campañas políticas, en las que se comprometen a no aumentar tarifas y ahí tienes el resultado: 522 millones de pesos de déficit para este año”.
Concluyó diciendo que todos los que habitamos la ciudad hemos aportado a este panorama: “Como dice el refrán: ‘Entre todos la mataron, pero ella sola se murió’. (Todos) hemos aportado y al final de cuentas ahí está el problema”.
Detallan proceso para sumarse a propuesta de la CEA
De 234 plantas de tratamiento en Jalisco, sólo funcionan 144
Al momento, el Estado de Jalisco cuenta con 234 plantas de tratamiento de aguas residuales, sin contar 15 que se encuentran en fase de estudios y proyectos, seis en proceso de construcción y dos más en su periodo de licitación. Del universo antes expuesto, únicamente 144 operan de forma óptima; 25 han sido dadas de baja, cinco están estabilizándose y 60 están fuera de operación.
Ante ello, los municipios convocados a sumarse a la propuesta de la Comisión Estatal del Agua (CEA) para que les financie parte de la operación de sus plantas, tienen hasta el próximo 15 de diciembre para que el Gobierno del Estado haga un diagnóstico de su situación, y después, determinarían si desean dar continuidad con las negociaciones.
Al término de este protocolo, el Ayuntamiento se comprometerá a rehabilitar su planta o plantas de tratamiento, y una vez concluido esto, la CEA comenzará a dar su apoyo económico para el funcionamiento.
De acuerdo con el titular de la CEA, César Coll Carabias, se trata de una propuesta cuya eventual puesta en marcha se vislumbra “difícil”, dado que no hay una cultura sólida del pago por agua.
No obstante, considera que la situación económica al paso de los años puede mejorar: “El agua es fundamental en la vida de todos, entonces debemos darle ese nivel. No se vale que hay municipios que sí tengan dinero para arreglar su plaza pública, pero no tenga dinero para operar su planta”.
PARA SABER
El techo financiero que tendrá la CEA para dar este apoyo a los municipios del interior del Estado aún no se ha cuantificado, toda vez que los ayuntamientos involucrados no han resuelto si se agregarán o no a esta propuesta del Gobierno del Estado.
Hasta el 15 de diciembre del año pasado, las instancias estatales han contabilizado 44 municipios sin una planta de tratamiento de aguas residuales.
FRASE
"No se vale que hay municipios que sí tengan dinero para arreglar su plaza pública, pero no tenga dinero para operar su planta (de tratamiento)".
César Coll,
director de la Comisión Estatal del Agua.
César Coll Carabias, director de la Comisión Estatal del Agua (CEA), respondió así a la pregunta de qué opinión le merece el resultado de dicho estudio, elaborado en 17 ciudades latinoamericanas, y en el cual Guadalajara comparte el último lugar con la ciudad de Lima, capital de Perú.
“No es novedad, quienes hemos estado en este tema años atrás hemos visto la problemática que cada vez se ha ido agudizando. Desgraciadamente el organismo operador (el SIAPA) no dispone de los recursos o apoyos para lograr que (su déficit hídrico) no se incremente, que ya sería un éxito; y que se revierta, lo cual ya sería el objetivo”.
Para Coll, las deficiencias son tan claras desde el hecho de que no se sabe a ciencia cierta la cantidad exacta del vital líquido que se distribuye en la Zona Metropolitana de Guadalajara (ZMG).
“No toda el agua que se mete al sistema de distribución de los cuatro municipios (metropolitanos) sabemos con precisión cuánto es, porque no hay macromedición, o hay en 30% (…) No hay recursos, y (además) está muy comprometido financieramente el organismo; entonces todo esto hace que se limite su actuación en cuanto a reemplazos de infraestructura”.
Dijo que el problema inició cuando se realizaron obras de gran magnitud para la dotación de agua a la ciudad, que generaron fuertes deudas al organismo metropolitano, mismas que a la fecha no ha logrado cubrir.
“Cuando se hicieron las obras de la Presa Elías González, el Acueducto (Chapala-Guadalajara), la Presa San Gaspar y El Salto en Valle de Guadalupe, se originó una gran deuda y se transfirió al organismo (…) entonces, si el organismo se volvió un gran deudor y no tuvo la capacidad de pago, pues esa deuda ha sido como una bola de nieve que cada año va aumentando”.
En adición a ello, subrayó, la falta de una cultura de pago por los servicios de agua potable y la indisposición del Poder Legislativo para resolver el problema, han sido las causas que generaron esta mala percepción internacional de Guadalajara.
“He visto que llegan peticiones para mejorar e ir cortando la brecha entre el costo real y la tarifa (de agua), y son justamente los diputados los que no las aprueban. Se van por el índice del precio al consumidor cuando se requiere más.
“Luego vienen las campañas políticas, en las que se comprometen a no aumentar tarifas y ahí tienes el resultado: 522 millones de pesos de déficit para este año”.
Concluyó diciendo que todos los que habitamos la ciudad hemos aportado a este panorama: “Como dice el refrán: ‘Entre todos la mataron, pero ella sola se murió’. (Todos) hemos aportado y al final de cuentas ahí está el problema”.
Detallan proceso para sumarse a propuesta de la CEA
De 234 plantas de tratamiento en Jalisco, sólo funcionan 144
Al momento, el Estado de Jalisco cuenta con 234 plantas de tratamiento de aguas residuales, sin contar 15 que se encuentran en fase de estudios y proyectos, seis en proceso de construcción y dos más en su periodo de licitación. Del universo antes expuesto, únicamente 144 operan de forma óptima; 25 han sido dadas de baja, cinco están estabilizándose y 60 están fuera de operación.
Ante ello, los municipios convocados a sumarse a la propuesta de la Comisión Estatal del Agua (CEA) para que les financie parte de la operación de sus plantas, tienen hasta el próximo 15 de diciembre para que el Gobierno del Estado haga un diagnóstico de su situación, y después, determinarían si desean dar continuidad con las negociaciones.
Al término de este protocolo, el Ayuntamiento se comprometerá a rehabilitar su planta o plantas de tratamiento, y una vez concluido esto, la CEA comenzará a dar su apoyo económico para el funcionamiento.
De acuerdo con el titular de la CEA, César Coll Carabias, se trata de una propuesta cuya eventual puesta en marcha se vislumbra “difícil”, dado que no hay una cultura sólida del pago por agua.
No obstante, considera que la situación económica al paso de los años puede mejorar: “El agua es fundamental en la vida de todos, entonces debemos darle ese nivel. No se vale que hay municipios que sí tengan dinero para arreglar su plaza pública, pero no tenga dinero para operar su planta”.
PARA SABER
El techo financiero que tendrá la CEA para dar este apoyo a los municipios del interior del Estado aún no se ha cuantificado, toda vez que los ayuntamientos involucrados no han resuelto si se agregarán o no a esta propuesta del Gobierno del Estado.
Hasta el 15 de diciembre del año pasado, las instancias estatales han contabilizado 44 municipios sin una planta de tratamiento de aguas residuales.
FRASE
"No se vale que hay municipios que sí tengan dinero para arreglar su plaza pública, pero no tenga dinero para operar su planta (de tratamiento)".
César Coll,
director de la Comisión Estatal del Agua.
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