COCAS DE MEZCALA...

Es absurdo que el gobierno no reconozca a los cocas: Alonso

• Ignoran su gesta heroica en la Independencia: GaraizJulio Ríos.- Donde el gobierno ve ruinas, los cocas de Mezcala ven la gloria, la palabra y la sangre de sus antepasados, señala el académico e investigador Jorge Alonso Sánchez, quien calificó de absurdo que las autoridades no reconozcan oficialmente a esta comunidad, pero paradójicamente, aseguró que los pobladores no necesitan de eso, pues el orgullo que sienten por enarbolar sus tradiciones es más que suficiente para revalidar día a día su añeja tradición.
“Las autoridades no los han querido reconocer como pueblo indígena, los comuneros consideran que esto es un ataque más a su pueblo. Pero han sostenido que no necesitan el reconocimiento legal para seguir siendo en verdad lo que son. Ellos se ufanan de ser indígenas, de defender su tierra, su autogobierno, y no haber perdido la memoria histórica, que es lo más importante de este pueblo que ha defendido la tierra de manera colectiva como sus ancestros. Para sentirse indígenas basta con que el pueblo sepa que lo es y defienda esta identidad”, señaló Alonso Sánchez, catedrático del Ciesas.
Explicó que los comuneros de Mezcala han resistido agresiones por más de 500 años y se han enfrentado sin temor a las autoridades eclesiásticas y civiles que han querido someterlos.
“Ellos saben que su paso por la historia es duradero, tenaz y sabio y su autonomía es precisamente su mejor defensa”.
Y relató: “Alguna vez les pregunté si no están en contra del progreso. Ellos me decían que lo que no querían era ser sirvientes en su propia casa, ser vasallos de otros que llegaron a ofrecerles trabajo de camareras o mozos en complejos turísticos que querían fundar ahí, porque eso no es progreso”.
Por su parte, Esteban Garaiz recordó la gesta heroica de los indígenas de Mezcala que no permitieron la entrada de los españoles a su territorio: “En Jalisco el único episodio glorioso de la lucha por la Independencia se dio en esta isla donde valientemente los indígenas resistieron cuatro años, de 1812 a 1816. La única manera fue proponerles un armisticio honroso”.