Este modelo “ya llegó al tope”
CD. Y REGIÓN • 7 FEBRERO 2013 - 4:34AM — AGUSTÍN DEL CASTILLO
El secretario de Medio Ambiente para el Desarrollo Sustentable de Jalisco, reconoció a MILENIO RADIO la necesidad de un nuevo esquema de gestión ambiental.
Guadalajara • La Secretaría de Medio Ambiente para el Desarrollo Sustentable (Semades) tiene poco más de 12 años de existencia y parece haber llegado a los límites de sus posibilidades, reconoce su titular, Héctor Eduardo Gómez Hernández.
Dotada con presupuestos escasos, debió apelar a la capacidad de negociar recursos de los fondos federales para crear instrumentos que serán muy útiles para el futuro de la entidad, como las áreas protegidas, los ordenamientos ecológicos locales, nuevos programas como los de conservación de la biodiversidad, de protección al jaguar y sobre el cambio climático.
También logrará entregar ampliada y casi modernizada la red de monitoreo atmosférico de la zona conurbada de Guadalajara, tras 20 años en que no se le metió dinero; se terminarán más de 40 rellenos sanitarios que cumplen con las normas oficiales federales en la materia, y se consolidará ese pacto intergubernamental (municipios-estado-gobierno federal) del Polígono de Alta Fragilidad Ambiental de la Cuenca de El Ahogado.
Con los expedientes en marcha, Jalisco podría contar este mismo año con 15 por ciento de su territorio bajo esquemas de protección ambiental, 31 polígonos protegidos, que lo acercan a los estándares internacionales. En saneamiento de aguas negras, el salto ha sido de 16 a 32 por ciento de aguas saneadas, pero quedará arriba de 60 por ciento cuando entre en operación la planta de Aguaprieta.
En entrevista con MILENIO RADIO, el secretario destaca que en los seis años, el Programa de preservación y restauración del medio ambiente de Jalisco logró avanzar una casilla en el índice de competitividad nacional, mientras la posición del subíndice denominado “manejo sustentable del medio ambiente”, partió de la casilla 22 de 2007 a la casilla diez en 2012.
— ¿Cómo le gustaría que lo recordaran en su paso por la Semades?
— Primero, por el equipo que me tocó dirigir, un equipo muy capaz, y luego, por los resultados que logramos en el corto periodo que presidí la Semades, de apenas un año y ocho meses.
— Queda la impresión de que como están las cosas diseñadas en este momento, se puede tener un presupuesto de dos o tres veces más, pero las atribuciones de la secretaría topan y pierden frente a otros tipos de intereses, legítimos sin duda, como el desarrollo económico; y además, tampoco puede incidir mucho en grandes temas como la deforestación o el desarrollo urbano caótico…
— Ciertamente falta impulsar más la agenda verde, que se discutió en Río+20, y que consiste en enverdecer diez sectores de la economía, y nosotros le agregamos en la propuesta en que participamos el acuerdo para promover el enverdecimiento, ver 15 redes de servicios gubernamentales, que son los de los tres órdenes de gobierno; de ahí la importancia que los gobiernos municipales también asuman sus tareas, porque en efecto, no se aterrizan las políticas que se firman a nivel internacional.
— Sin duda van a dejar muchos instrumentos y materiales; la siguiente Administración no empieza de cero.
— Claro, quiero resaltar el tema de las áreas naturales protegidas; teníamos 15 en 2007, y se entregan 31 áreas, cinco en proceso; y si logramos que salgan esas cinco pendientes son nada menos que la montaña alta de Puerto Vallarta, el Cerro Viejo de Tlajomulco, el cinturón verde en torno a Chapala, la del bosque de arce de Talpa […] es ya una superficie sobre la cual se puede trabajar y generar procesos muy positivos.
— Estamos de acuerdo que este modelo ustedes ya lo agotaron en sus máximas posibilidades y es necesario que la secretaría de Medio Ambiente adquiera otro protagonismo, y que además, el tema ambiental sea factor esencial en cada decisión de gobierno…
— Por supuesto, debe ser un aspecto transversal, un eje muy importante de la política pública, y que se debe ver reflejado en el presupuesto, por supuesto que sí.
— ¿Qué va a hacer después del 1 de marzo?
— Yo seguramente regreso a mis clases y retomo lo que tuve en el pasado, mi planta de reciclado; hacíamos fantasmas de carretera con botellas de leche; nosotros impulsamos aquel famoso programa de Cambio Amigo, cuando estaba César Coll como presidente municipal: un kilo de arroz por uno de polietileno, y daba vales por un kilo, y ese programa fue muy exitoso hace 17 o 18 años, y creo que puede dar más.
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